Voy a escribir sobre máquinas creadas por el diablo.
Para el que haya tenido la suerte de no saber que son; el GPS es
un aparato que te localiza y te indica con voz de Satán por donde tienes que ir
para llegar a tu destino.
¿Exagerado?
A mí el GPS me ha intentado asesinar.
Así es.
Os lo cuento:
Iba yo en coche, y activé mi GPS para probarlo. Al inicio, y
como buen psicópata, todo iba bien. Hasta que le contradije en varias ocasiones,
no le sentaría nada bien y tras media hora, la voz del aparato me indicó que
girara a la izquierda. A mi izquierda lo único que había era un quitamiedo que
limitaba la carretera con un terraplén de piedra caliza que ni la vista me
alcanzaba a ver el fondo. Con miedo, pero conocedor de lo que intentaba, gire a
la derecha. A lo que solamente pudo decir: “Gire a la izquierda en cuanto sea
posible sin cometer ninguna infracción”
La voz de una Psicópata asesina.
Y ahora vienen los nuevos GPS. Con voces de personajes famosos
o, para mí el sumun de la maldad, poder grabar tu propia voz. Consiguiendo que
si no te tiras por el precipicio por las indicaciones, acabes tan asqueado de
tu voz, que decidas acabar con tu propia vida.