domingo, 14 de agosto de 2011

EXPERIENCIA PERSONAL: I

Cuando era más joven aún, y todavía andaba de la mano de mi madre por carecer de la capacidad orientativa, pasó bien cerca una persona pelirroja. Puesto que estaba conociendo por primera vez este mundo, le pregunté a mi madre la razón del porqué de ese pelo tan raro. Ella, sin remilgos ni compasión, me explicó que simplemente se lo había pintado.


Hoy me imagino la sonrisa burlona que maculaba mi madre, que en ese momento no llegué a ver, ya que mi asombro hizo que no perdiera de vista al individuo pelirrojo hasta que éste desapareció. Pero ese comentario se estrujó en mi cabeza de una forma muy curiosa.

Después del acontecimiento, razoné que en realidad los distintos colores del pelo que existen son explicables porque todo el mundo se los pinta, e instintivamente caí por aquel entonces en la cuenta de que todo el mundo teníamos el mismo color de pelo, y eran los tintes los culpables de esta diferencia. Al ser yo más bien tirando a rubio, comprendí que vivía en un mundo de gente rubia. Al ser todos rubios por igual, creció en mi interior el primer sentimiento de igualdad que recuerdo. Sentimiento humano que se estructuró con mucha fuerza en mi interior, por haber sido un descubrimiento personal.

Y fue muy sencillo a partir de entonces dar explicación a otros problemas del mundo: a cualquier diferencia entre mis compañeros, yo siempre les hacía razonar que en realidad somos todos iguales, y que las disputas entre nosotros no tenían sentido. A partir de aquí se iniciaron las innumerables palizas que mis compañeros y amigos me propinaban, justificadas, en parte, por no querer tener entre ellos a un reverendo. Estas palizas se acabaron haciendo periódicas y estáticas en hora, con la finalidad de amedrentar mis novedosas ideas.

Por supuesto, hoy en día mantengo cada uno de mis preconcebidos conceptos, y defiendo que la violencia, por muy fuerte que sea, no llega nunca a matar los ideales de nadie. Y siendo así, hace poco volví a ver a un pelirrojo. Son verdaderamente una raza extraña…

¿A dónde van con ese pelo?





Pronto hablaré de la fórmula magistral para hacerle el vacío a un amigo, muy recomendado y efectivo, si éste es albino.