viernes, 24 de octubre de 2008

MIS LECTURAS.

Bueno la verdad es que para el que no lo sepa, me gusta leer, y bastante. Pero hay dos momentos en el día que especialmente necesito tener lectura. Uno de ellos es cuando voy al trono de la caca, porque todo el que necesite lectura para ese momento del día ha cogido el bote de champú y ha leído “Un cabello increíblemente limpio y nutrido desde el cuero cabelludo. Este Champú relajante está especialmente creado para añadir hidratación esencial al cabello seco, dejándolo con un aspecto sano, suave y flexible” Todo un típico. El otro momento para el que necesito tener lectura es en el desayuno. Porque yo estoy seguro que seré el típico que cuando sea más mayor, desayunará con el periódico y el café muy caliente. Y el que al estar tan ensimismado en la lectura se le olvide tragar y acabe derramándose el café por toda la corbata y parte del traje, ¡Si! así seré yo. A todo esto, el otro día estaba yo desayunando tan tranquilo en mi casa, y necesitaba lectura. Como comprenderéis no iba a ir a por el bote de champú al cuarto de baño, no porque no se me ocurriera, sino porque lo tenia releído hasta la saciedad. Bueno pues me puse en busca de lo que iba a ser para mí, la lectura matutina. Lo encontré. Era un cartón de cereales, que para el que no lo sepa, los cereales los odio para desayunar. No hay nada como un buen pan con tomate... Para mi sorpresa de ese día, me encontré con esto en la parte trasera del susodicho asesino del desayuno mediterráneo.







Serían las 8.30 o las 9 de la mañana, que en mi casa es como la hora punta del metro de Madrid; gritos, peleas, ruidos extrañísimos que solamente suenan a esa hora del día, etc. (Evidentemente no hay trenes en mi casa) Cuando me topo con esta MOUSTROSIDAD.

Nunca antes me había fijado, la verdad, pero serian los ruidos, la hora o mi increíble mente fluida y analizadora la que se dio cuenta del siguiente detalle.
Digamos que es una pirámide dividida en dos partes. La primera, la zona más alta de la pirámide, es los alimentos de consumo ocasional. La zona de los cimientos de la pirámide está para los alimentos de consumo diario. Si, DE CONSUMO DIARIO. Pero que ser humano puede ingerir ¡EN UN SOLO DÍA! dos pescados, un pollo entero, un queso entero, una cantidad indigente de frutas y verduras, un saco de harina, otro de arroz, un paquete de cereales (que la verdad, ya podrían coincidir con los que tienes en la mano ¿no?, joder, como si estuvieran dejando claro que esos cereales son una mierda). Eso sin contar con que ocasionalmente tienes que comer esos chorizos, carne y demás cosas.

La verdad es que únicamente me queda pensar lo siguiente:

Hay un error de imprenta. Y en vez de ser el SENC (Sociedad Española de Nutrición Comunitaria). Sería SENCED (Sociedad Española de Nutrición Comunitaria para tu Elefante Domestico).
Porque ahí si doy un aplauso, solventando las dudas de la gente. Poniendo una pirámide para saber que alimentos tienes que darle a tu pobre elefante domestico. Por ello, y por ser el primero en darme cuenta, me digno a poner corregida la pirámide.